La mirada atenta sobre el comportamiento de las exportaciones de Chile hacia Argentina y Brasil presenta algunas señales de alerta para los exportadores de la Norpatagonia.
De acuerdo a los números de la Aduana de Chile, en los primeros 8 meses del año el vecino país vendió a Brasil un 75,2% más de manzanas que en igual período de 2009. También declaró precios FOB 4,4% menores que un año antes: un promedio de 63 centavos de dólar el kilo en los 8 meses y de 59 centavos en agosto (ver cuadro 1).
Las ventas chilenas a Brasil no son todavía importantes, sólo sumaron 6.461 toneladas, cuando en el mismo período Argentina vendió 26.196 toneladas. Sin embargo se destacan dos aspectos: 1) Argentina vendió a precios mucho más altos, 81,2 centavos el kilo según las declaraciones de Aduana y 2) Chile es el principal productor de manzanas del mundo, lo que significa un jugador con una gran oferta potencial.
Las interpretaciones de los operadores regionales consultados por E&E fueron principalmente dos. Algunos empresarios relativizaron el dato, dijeron que este año Chile tuvo problemas de calidad con su fruta y debió deshacerse de stocks que no pudo colocar en sus destinos tradicionales.
Otros, en cambio, se sumaron a las demandas políticas sectoriales y dijeron que lo que en realidad sucede es que Chile tiene costos de producción más bajos, entre ellos menos impuestos, y por eso puede competir en un mercado tradicionalmente “argentino”.
Según pudo saber E&E sobre la base de la información de aduana, los principales importadores de manzanas chilenas en Brasil fueron: YARA Alimentos, Leraplay, Crisfrut, Benassi Sao Paulo, Copsul, Silvestini Frutas y Brasilera de Distribución. Muchas de estas firmas son clientes de las empresas del Alto Valle. Las empresas que exportan desde Chile son: Unifrutti, David del Curto, Expotadora Gonzagri, Dole, Greenvic y Meyer.
Hacia Argentina
El aumento de exportaciones de manzanas también se registró en las ventas chilenas a Argentina, que sumaron 1.037 toneladas en los primeros 8 meses de 2010, un 26,5% más que un año antes, a un precio promedio de 63 centavos de dólar el kilo. Se trata de ventas totales registradas en la Aduana chilena por poco más de 650 mil dólares (ver cuadro 2).
No se trata de un volumen que mueva el termómetro del mercado local. El fenómeno no parece estar asociado a la aparición de un nuevo jugador, ni exclusivamente a la colocación de stocks excedentes que no pueden exportarse a otros mercados, sino a los intereses de las firmas chilenas que operan en la gran distribución minorista: el principal importador de estas manzanas fue Jumbo Retail Argentina S.A., pero también Dole, firma con subsidiaria local pero manejada en la región desde Chile, y Tanus Jalis e Hijos. Las empresas que venden desde Chile son: Dole, Unifrutti, David del Curto y Agroindustria J. Soler.
Mirando desde el Alto Valle
El cuadro que surge de los datos se compone, por un lado de la opinión de los operadores y por otro de la información pública, que no es necesariamente la de mejor calidad. La información privada, más completa, es estratégica y por lo tanto se guarda bajo 7 llaves. Al observador le queda entonces como única posibilidad de análisis juntar los datos dispersos de oferta y demanda.
Por el lado de la oferta, un dato clave es el stock de fruta en frío, un indicador redescubierto públicamente a partir de que la Secretaría de Fruticultura de Río Negro comenzara a cumplir nuevamente con algunas de las tareas informativas que se autoimpuso allá lejos y hace tiempo. De acuerdo al último informe del organismo, en agosto quedaban en los frigoríficos rionegrinos 56.761 toneladas de peras y 123.942 de manzanas. Aunque por distintos medios interesados se insista en que queda en frío un gran remanente de fruta, no es así. En manzanas se está en el rango de los últimos años. Y si bien el porcentaje de peras es 96% superior al año pasado, incluso el volumen más alto de la serie histórica, no se trata de un volumen absoluto significativo. Por otra parte, de acuerdo a fuentes privadas que suman los datos de Neuquén y Río Negro, el stock de manzanas es 10% más alto y el de peras 50%.
Por el lado de la demanda, en tanto, a esta altura del año los datos son que la temporada de ultramar terminó y que las ventas para cerrar la temporada se concentran en el mercado interno y Brasil.
La conclusión preliminar sobre el mercado, entonces, es que el volumen de ventas de manzanas argentinas a Brasil y al mercado interno no se vería afectado por la participación creciente de la fruta chilena, cuyas cantidades son todavía exiguas en términos relativos. En Brasil, además, es muy probable que los menores precios a los que exportó Chile respondan más a cuestiones de calidad de la fruta enviada que a la competitividad intrínseca de la fruticultura trasandina. Sin embargo, esta oferta a bajo precio de fruta chilena también podría producirse un cambio de expectativas, situación que daría lugar a ventas más lentas y problemas financieros para los exportadores argentinos. En este caso, el peor de los escenarios, sería una buena noticia para las jugueras locales, que podrían recibir más fruta.
En lo que hace al mercado interno, en tanto, el volumen de fruta trasandina ingresada no es relevante, siempre en términos relativos, y sólo parece ser una consecuencia indeseada de la actuación del capital supermercadista chileno.
Fuente: http://www.lmneuquen.com.ar
domingo, 3 de octubre de 2010
Aumenta la entrada de manzanas chilenas
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